Tras las altas temperaturas registradas a fines de enero, cuando la sensación térmica subió hasta 43 grados en la Ciudad, el Servicio Meterológico Nacional (SMN) pronosticó una otra ola de calor para esta semana en la Capital: la máxima podría alcanzar los 39 grados-
El termómetro comenzó a subir este lunes y llegará a una marca máxima antes del sábado. Luego de este pico de 33 grados, la temperatura no sólo no bajara sino que habrá una suba de dos grados por día.De esta manera, el jueves llegaría a los 39 grados. Las mínimas, en tanto, también serán altas y oscilarán entre 23 grados y 26 grados.

¿Cómo prevenir el golpe de calor?
Un golpe de calor es el aumento de la temperatura del cuerpo por una exposición prolongada al sol (insolación clásica) o por hacer ejercicios en ambientes calurosos o con poca ventilación) al punto que el cuerpo pierde agua y sales esenciales para su buen funcionamiento.
En estas situaciones el cuerpo tiene dificultades para regular su temperatura por los mecanismos habituales como la sudoración por lo que se produce un aumento de la temperatura corporal. El golpe de calor puede presentarse en el momento o después de varios días de alta temperatura.
Qué hacer para prevenirlo
- Evitar las actividades al aire libre, la exposición al sol en exceso y reducir la actividad física entre las 11 y las 17 h.
- Salvo contraindicaciones médicas, tomar abundante líquido, evitando bebidas alcohólicas o muy azucaradas, y comer liviano, sobre todo frutas y verduras.
- Usar ropa ligera, holgada y de colores claros, y protegerse del sol con gorro y anteojos oscuros.
- Prestarle especial atención a los adultos mayores de 65 y a los niños menores de 5 años.
- Permanecer en espacios frescos y ventilados.
Cuáles son los síntomas
- Piel enrojecida, caliente y seca.
- Temperatura corporal entre 41 y 42 grados.
- Dolor de cabeza.
- Náuseas y confusión.
- Convulsiones y pérdida de conocimiento.
- Respiración y pulso débil.
Qué no hacer
- Aunque tenga fiebre, no tomar antifebril.
- No refregar alcohol en la piel.
¿Quiénes son los más vulnerables?
Cualquier persona puede ser víctima de un golpe de calor. Sin embargo se debe
tener especial cuidado con los siguientes grupos ya que tienen mayor riesgo de
padecerlo:
• Bebés y niños especialmente menores de 1 año (ya que su cuerpo tiene menor capacidad para regular su temperatura)
Bebés que padecen de fiebre por otras causas o diarrea
Personas con enfermedades crónicas (afecciones cardíacas, renales o neurológicas)
Niños obesos o desnutridos
Personas que tienen la piel muy quemada por el sol
Jóvenes que abusan de bebidas con alcohol y de drogas
Personas mayores
Si aparecen estos síntomas, llamar al 107 (SAME).
¿Qué se puede hacer mientras llega la asistencia?
Trasladar al afectado a la sombra, a un lugar fresco y tranquilo.
Refrescarlo mojándole la ropa y la cabeza.
Darle de tomar agua fresca.
Mantener su cabeza elevada.