Una escuela tiene el nombre de un cura antisemita y quieren cambiarlo

Un grupo de familias de la Escuela N° 17 Monseñor Gustavo Franceschi, del barrio de Colegiales, pidieron el cambio del nombre del establecimiento por el carácter “antisemita y totalitario” del sacerdote, y esperan un proyecto en la Legislatura para aprobar la modificación que ya tiene el visto bueno del oficialismo. 
“La escuela tiene que dejar de honrar con su nombre a un antisemita, que fue puesto en una dictadura y apoyó los golpes militares en Argentina”, dijo a Télam una de las madres, que prefirió el anonimato ante la “polémica” generada por el cambio de nombre del colegio. 
El reclamo para quitar el nombre de Francheschi comenzó en 2018, cuando un grupo de familias indagó sobre el sacerdote y, al ver que tuvo consideraciones antisemitas y en apoyo a las dictaduras del país, decidieron pedir el cambio.
“La cooperadora de la escuela tomó el tema el año pasado y propuso que se vote. En una primera votación ganó el cambio, pero luego hubo ciertos cuestionamientos y mucha gente que votó cambiar dejó de ir, entonces terminó ganando el no”, explicó la madre.
Gustavo Juan Franceschi, que murió en 1957, fue un periodista y sacerdote que tuvo relevancia en el catolicismo político en Argentina, principalmente como director de la revista Criterio, desde donde impulsó la fundación del Partido Demócrata Cristiano local.
Según la doctora en Historia del Conicet Olga Echeverría, quien realizó una tesis sobre los intelectuales de la derecha de la primera mitad del siglo XX, Franceschi “expresó un ferviente antisemitismo”.
“Entendía que en el propio accionar de los judíos -y en su propia existencia- se encontraba el ‘problema judío’ y proponía una ‘solución cristiana’: separarlos de la sociedad cristiana y mantenerlos en una situación de subordinación”, explicó. 
“En Argentina apoyó los golpes de Estado que se sucedieron a partir de 1930. En todos los casos lo hizo explícitamente y con mucha claridad”, agregó Echeverría.

Un comunicado de la cooperadora cuenta que el sacerdote ” acusaba a las personas judías de explotar económicamente a todos los países en los que vivían y de no identificarse con ninguno de ellos. Consideraba al ‘pueblo hebreo’ como el ‘disolvente social por antonomasia’ y como ‘enemigo interno’ de nuestro país, dado que entendía que ‘el espíritu judaico’ ponía en peligro nuestra nacionalidad, nuestra constitución familiar y nuestras tradiciones”.
El nombre de Monseñor Gustavo Franceschi, dijeron desde la Cooperadora, fue puesto en la escuela en 1967 por el Consejo Nacional de Educación, durante la dictadura de Juan Carlos Onganía.
El interés por la iniciativa trascendió a la comunidad educativa y vecinos de la escuela e instituciones como DAIA o La Casa de Ana Frank se sumaron al pedido.
“No podemos permitir que los chicos vayan a una escuela que tiene el nombre de una persona que odiaba a los judíos”, dijo otra de las madres, y aseguró que “le tienen que dar la posibilidad a los ciudadanos a que nombren a los colegios con nombres de personas respetables”.
A principio de año este grupo de padres fue a la Legislatura a pedir por un proyecto para el cambio de nombre. Fueron recibidos por el legislador de Vamos Juntos y titular de la comisión de Educación, Maximiliano Ferraro.
Desde el entorno del legislador confirmaron a Télam que “hay coincidencia” con lo que plantearon los vecinos y que se está elaborando un proyecto conjunto para el cambio de nombre para las próximas semanas.