Tal como ocurre en cada año electoral, la Legislatura porteña se convirtió, esta mañana en el escenario del escrutinio definitivo de las PASO en la Ciudad: se calcula que se tardará menos de diez días en contarse todos los votos porteños. El recuento será supervisado por la jueza federal con competencia electoral, María Romilda Servini.
Cabe señalar que las 7413 urnas arribaron al Palacio Legislativo el pasado lunes y desde entonces están siendo custodiadas por la Gendarmeria. Además, se debió acondicionar siete salones del edificio para poder llevar a cabo la actividad: el San Martín, Dorado, Perón, Jauretche, Montevideo, Alfonsín y el recinto de sesiones.
En el primero de ellos se instaló las computadoras con las que se cargarán los datos definitivos, al mismo tiempo que en el Salón Dorado se reunen las autoridades de la justicia electoral con los fiscales y autoridades partidarias para el recuento de los votos. Asimismo en el Perón, Jauretche, Montevideo -todos ellos ubicados en planta baja- se encuentran alojadas las miles de urnas que aguardan a ser escrutadas.
Según consignó Clarín, no se abrirán todas las urnas, sino en las que no haya coincidencia entre las actas que están dentro de los bolsines de esas urnas y los certificados que tengan los fiscales partidarios.