Un alumno del Instituto católico San José, ubicado en el barrio de Liniers, denunció que fue abusado por el sacerdote chileno Nelson Pérez Jerez cuando preparaba empanadas para un evento solidario en la cocina del colegio. El acoso sexual, relató el joven, ocurrió frente a todos sus compañeros de curso. La comunidad educativa alertó que la escuela había decidido el traslado del cura denunciado a una parroquia de la provincia de Santa Fe.
Según narraron autoridades de un hogar para discapacitados en Chile, Pérez Jerez ya tenía denuncias en su país de origen relacionado a abusos sexuales y a la falsificación de certificados de defunción de menores de edad con discapacidad.
“Pérez Jerez viene de una obra que se llama Don Guanella, que tiene varias sedes en Sudamérica, entre ellas en Chile, donde estuvo hasta el 2013 y tiene varias denuncias por abuso pero en el 2014 lo mandaron para acá”, agregó el padre de la víctima.

Todo ocurrió el sábado 13 de julio. Varios alumnos voluntarios del Instituto San José habían pedido permiso a las autoridades para usar la cocina: querían preparar empanadas para una nueva campaña solidaria. Incluso, se quedaron hasta la madrugada del domingo.
“El padre Nelson Jerez bajó de su habitación en un estado alcohólico intenso y comenzó a hacer chistes”, indicó la víctima y agregó que “a las chicas les dijo en ‘broma’ que iban al grupo misionero para estar conmigo porque era un pibe lindo y después las toqueteaba (el pelo, los hombros) y constantemente se acercaba a mí y me hablaba”.
El joven indicó que “se acercó con risas y me agarró fuertemente del culo. Mis compañeros del grupo lo vieron y se acercaron; yo estaba muy nervioso y me quería ir, porque me sentía muy mal”. La impunidad del cura quedó a la vista: luego del abuso, volvió a su habitación. Al día siguiente, el joven y sus compañeros, en compañía de algunos padres, se acercaron al juzgado Nacional en lo Criminal y Correcional 63 para radicar la denuncia. La causa cayó en las manos de la fiscal a cargo de Estela Andrades.
La valentía de los alumnos y la huída del cura a Santa Fe
Con carteles pegados en el frente de la parroquia Tránsito San José de Liniers, ubicado en la Avenida Emilio Castro 6351, que decían: “Curas pedófilos encubridores”, “Qué valores nos están enseñando”, “No nos callamos más”, padres y alumnos se reunieron esta mañana con las autoridades escolares para exigir la contención de los chicos que asisten a la escuela.
“Nos dijeron que lo apartaron de la Institución al padre Nelson y que los otros dos, acusados por encubrimiento estaban en el colegio pero no van a tener contacto con los chicos”, dijo Laura, mamá de dos alumnos de la escuela que participó de la reunión con autoridades escolares.
Desde el Colegio San José de Liniers, difundieron un comunicado donde detallaron que se decidió “separar al sacerdote de toda responsabilidad y tarea, hasta tanto el tema sea debidamente aclarado”, pero según señalaron padres de alumnos de la institución, “será apartado sólo por 90 días”.