Los trabajadores del Bauen, que sufrieron la clausura del hotel el pasado viernes, aseguran que la medida forma parte de una presión para “debilitarnos y obligarnos a negociar una salida” el próximo 2 de diciembre, aseguró en una entrevista radial el vicepresidente de la cooperativa, Federico Tonarelli. La Justicia ordenó la semana pasada el desalojo del inmueble, confirmando así un fallo de 2007.
“Todo se desencadenó el viernes, ya que veníamos de una serie de clausuras parciales por temas como el plan de evacuación y otras cuestiones que fuimos arreglando. En la última inspección la Fiscalía indicó cerrar todo y poner una consigna policial”, relató Tonarelli en diálogo con Radio Gráfica.
“Todo esto se empalma con la hipótesis de que el 2 de diciembre tenemos que dejar el edificio, y creemos que buscan llevarnos a una posición debilitada”, señaló el directivo. Y agregó: “Creen que debilitarnos económicamente, entorpecernos la tarea, nos obligará a negociar”.
En ese sentido, Tonarelli contó que durante el fin de semana pasado se iba a desarrollar en el hotel la BsAs Tattoo Expo, la primera convención internacional de tatuajes, pero “debido a la clausura tuvo que suspenderse”.
“La cooperativa perdió alrededor 500 mil pesos el sábado”, afirmó Tonarelli y agregó: “están jugando a fondo, sabemos a lo que nos enfrentamos con este tipo de cuestiones”.