Reabren los shoppings con sus propios protocolos y el ojo puesto en el Día de la Madre

A partir de mañana al mediodía, los shoppings de la Ciudad de Buenos Aires reabrirán sus puertas. Hace varios meses que la Cámara Argentina de Shoppings Centers (CASC), que los nuclea, venía reclamando regresar a la actividad presencial. Los negocios podían vender de manera online, pero el volumen era mucho menor. De hecho, según los datos de la Cámara, un 25% de los comercios no volverán a abrir y estaban en riesgo 50 mil puestos de trabajo.     

“Es oficial. Desde este miércoles 14 de octubre al mediodía abren los shopping centers”, afirmó entusiasmado Mario Nirenberg, presidente de la CASC, a la  Revista Fortuna.

La reapertura terminó de destrabarse hoy en una reunión en la Casa Rosada entre los funcionarios del Gobierno Nacional y del porteño.  

Los centros comerciales estuvieron cerrados desde el inicio de la pandemia de coronavirus. Esta medida se concreta cuando faltan cuatro días para el Día de la Madre. Es una fecha que los comerciantes intentarán aprovechar para recuperar cierto nivel de actividad.

Nirenberg dijo estar “contento” con la medida. “Volverán al trabajo los negocios y sus empleados”. Y señaló que como parte del acuerdo para la reapertura las autoridades podrán poner “nuevos protocolos o hacer más estrictos algunos ya propuestos por el sector”.  

Las medidas para intentar mantener el aislamiento social y evitar que los centros comerciales se vuelvan centros de contagio de Covid son las siguientes.

  • Termómetros digitales y cámaras que toman a la distancia la temperatura corporal de los visitantes.
  • Alfombras sanitizantes para el calzado en la entrada de cada local.
  • Instalación de múltiples dispensadores de alcohol en gel distribuidos en todos los espacios comunes.
  • Señalización de sentidos de circulación y distanciamiento social en el piso de los pasillos.
  • Calcomanías en las vidrieras de todos los locales, en las que se indica el número máximo de clientes que pueden permanecer en su interior.
  • Limpieza permanente de superficies de roce comunes y de instalaciones sanitarias. 
  • Cámaras cuenta personas ubicadas en las entradas que se habilitarán para garantizar que el número de visitantes no supere lo establecido.  
  • No habrá más de un cliente cada 15 metros cuadrados.

Esta última exigencia del protocolo aún no está confirmada por el Gobierno porteño. Para dar una idea de lo que implicaría respetarla, en el shopping del Abasto, que tiene 120 mil metros cuadrados, no podría haber más de 8000 personas al mismo tiempo.