El jueves pasado la Legislatura porteña sancionó una ley de “promoción de residencias para estudiantes”. Establece beneficios fiscales para quienes remodelen sus hoteles o edifiquen para recibir a estos residentes transitorios en la Capital. Según los cálculos del gobierno porteño, son unas 170.000 personas las que cursan carreras terciarias, universitarias, de post-grados, y que vienen de otros lugares del país y el extranjero.
El proyecto fue presentado por Vamos Juntos. Se aprobó con 39 votos a favor, el oficialismo y sus aliados habituales, y 20 en contra, del Frente de Todos y el FIT.
En los fundamentos de la iniciativa presentada Gonzalo Straface (PRO) se señala que existe una demanda insatisfecha de alojamiento para estudiantes y otros visitantes que asisten a congresos y convenciones. Destaca que con más de medio centenar de instituciones de educación superior, la Ciudad registra un total 575.000 estudiantes. Sobre esa cifra, según el proyecto, 85.000 provienen de diversas regiones de la Argentina y 90.000 del exterior. “Hoy la Ciudad tiene apenas 38 residencias universitarias con unas 1.100 plazas”, remarca la iniciativa.
“El impulso al desarrollo de residencias estudiantiles en el Casco Histórico contribuirá a revitalizar la zona. Pondrá en valor su patrimonio y permitirá aprovechar 117 predios inactivos que suman 58.521 metros cuadrados de terrenos en desuso”, sostiene otro párrafo de los considerandos.
La norma extiende el régimen de incentivos para el sector hotelero que ya se había aprobado en 2018. Amplía los porcentajes de inversión realizada computables en concepto de ingresos brutos para los proyectos emplazados en determinadas zonas de la Ciudad, en los barrios con una menor concentración de hoteles.
Sobre esta ley, el legislador porteño del Frente de Todos Santiago Roberto remarcó: “Las demandas que nos han acercado desde este sector no tienen que ver con incentivar la inversión para ampliar o crear nuevos espacios, como plantea esta norma. Piden ayuda concreta para poder sostener la actividad y evitar que cierren más hoteles”.
El legislador cuestionó el orden de prioridades del oficialismo porteño. “No se está tratando la emergencia habitacional. Actualmente existen 117 predios inactivos cerrados en el casco histórico. Para nosotros deberían convertirse en residencias sociales y no para estudiantes. Que sirvan para resolver el serio problema habitacional que tienen los habitantes de la Ciudad y que es urgente”.