Uno de los sectores más castigados por la pandemia fueron las actividades culturales. Las medidas de aislamiento social para prevenir la expansión del coronavirus se centran, sobre todo, en la interrupción de la “vida social” y de las actividades que reúnan personas en lugares cerrados. El cine, el teatro, las milongas, las presentaciones de libros, las muestras de pintura, la danza, los conciertos, toda la vida cultural consiste, entre otras cosas, en reunirse con otros. Así que el impacto de la pandemia ha sido devastador.
La Dirección de Estadística y Censos del Gobierno porteño publicó este martes 13 de julio su anuario estadístico. Es un informe de más de 200 páginas que repasa desde del promedio de las temperaturas hasta la cantidad de casamientos. Y en uno de sus ítems presentó los números de los consumos culturales en los establecimientos que dependen del gobierno porteño. Es una muestra del cataclismo que sufrió el sector.
En la Ciudad seis teatros dependen del gobierno. Son el Colón, el San Martín, el Alvear, el Regio, De la Ribera y el Sarmiento. Las estadísticas del movimiento en este complejo son las siguientes. En el año 2018, hubo 926.487 personas (entradas cortadas) que asistieron a estas salas. Y en 2019 la cifra bajó un poco a 899.349. La caída de 2020 es difícil de dimensionar. El derrumbe rondó el 96%, faltó poco para que fuera total. Asistieron en todo el año solo 28.108 personas.
En el Colón directamente no hubo funciones, así que no asistió nadie. Y en el San Martín, que en 2019 había vendido más de 290 mil entradas, se cortaron 24 mil el año pasado.
Lo mismo ocurrió con los museos. En el caso de los que dependen del Gobierno de la Ciudad, asistieron 142.639 personas en todo el 2020. En el 2019 había concurrido 1.032.480. En los que están ubicados en la Ciudad pero dependen del gobierno nacional, la baja resultó similar. Los visitaron 245.217 personas el año pasado mientras que en 2019 había concurrido 1.482.263.
Los libros tampoco se salvaron. La estadística disponible en el informe es la de visitas a las bibliotecas municipales. En 2019 habían asistido 289.125 lectores a solicitar libros o usar las instalaciones. El año pasado (las bibliotecas también estuvieron cerradas varios meses) fueron algo más de 29 mil personas. Es un botón de muestra del impacto que tuvo la pandemia en la vida cultural de Buenos Aires.